“Pero el padre le dijo: Hijo mío, tú estás siempre conmigo, y todo lo mío es tuyo. Es justo que haya fiesta y alegría, porque tu hermano estaba muerto y ha vuelto a la vida, estaba perdido y ha sido encontrado".
“Pero él respondió: Señor, déjala todavía este año; yo removeré la tierra alrededor de ella y la abonaré. Puede ser que así dé frutos en adelante. Si no, la cortarás".
En el noveno aniversario de su elección como Papa, recemos a la Virgen de Luján por él, para que siga llevando la alegría del Evangelio a todo el mundo.